El 22 de noviembre fue Santa Cecilia, por ser este miércoles la banda de música retrasó al sábado 25 el concierto en honor a su patrona. El lugar elegido para el evento fue el moderno Centro Cultural Antonio Llorente, que cuenta con un auditorio con más de 300 butacas y donde también tiene su sede la Escuela Municipal de Música y Danza.
El acto dio comienzo con unas palabras del presidente de la Asociación Cultural Banda de Música de Meco para recordarnos que este era el día internacional contra la violencia de género. Al poco, las palabras se hicieron música, el concierto dio comienzo con un pasodoble. Inmarchitable, Goya florecía y resonaba tras lo que hasta aquel momento sólo era un discurso emotivo y triste. El auditorio se animó con Los Planetas y un público entregado se deleitaba con una melodía que sonora y gradualmente ascendía hasta el cielo. Después vendría Doppelte Ding, donde dos jóvenes solistas –Aurora Ramírez y Francisco Sirvent- demostraron que la juventud no está reñida con el saber hacer. La primera parte finalizó con un pasodoble que recibió los aplausos del público.
Gloria Pampliega y Francisco Javier Caraballo nuevos miembros de la Banda
En el descanso, Pedro, presidente de la Asociación, dio la bienvenida a dos nuevos músicos que este año comienzan su andadura en la Banda: Gloria Pampliega y Francisco Javier Caraballo. De nuevo juventud y seriedad se aúnan en estos nuevos integrantes de la banda. Luego saldrían a escena damas y musas que con su belleza iluminarán el camino de nuestra joven banda durante un año.
Sin más demora comenzó la segunda parte. Peña Taurina Vitoriana de Martín Domingo, fue la pieza elegida para el principio de esta segunda parte, Acuarelas Campesinas y el Monumental Contrasto Grosso nos anunciaron el final de un ejemplar concierto que terminaría, como no podía ser de otro modo, con el Himno de la Villa de Meco y un bis de dos temas, pues el público no quiso dejar marchar a los casi sesenta intérpretes sin exigirles un último esfuerzo que agradeció con calurosos aplausos.
Las celebraciones de Santa Cecilia se alargarían hasta el día siguiente con un pasacalle en honor de los recién incorporados compañeros, y un almuerzo de hermandad que reunió a una gran mayoría de socios, hermoso colofón para unas jornadas donde la música fue la gran protagonista.
Este post se publicó posteriormente en la revista LA MÚSICA (PDF).