Hoy recibo de las manos de mi amigo Primi un libro en el que ha sido colaborador necesario para llevarlo a termina «El caso Otaysa».
Pocos lo recuerdan, se lo pregunté a mi padre y tampoco fijó en su memoria a Santiago Gómez Pintado, Montejano, jugador del Real Madrid que coincidió con los históricos de la edad de oro del madridismo – Di Stefano, Gento o Puskas- y conoció personalmente a Santiago Bernabéu. Pero esto solo retrata parte de la azarosa vida de este emprendedor que creó Otaysa, aspiró a la presidencia del Club Blanco, se dejó la piel –y su empresa- en pugna contra el poder financiero de este país y tuvo la entereza de hacerse abogado con cincuenta años, y hoy, dirige su asesoría empresarial y jurídica.
“El caso Otaysa” hoy se encuentra en una de las estanterías de casa junto a “De Pepsi a Apple”, “Mis años en la General Motors” o “Amancio Ortega”, y todo gracias a mi buen amigo Primitivo Fajardo. Quién mejor que él para adentrarte, lector, en una autobiografía apasionante que te desentrañará los misterios de uno de los casos empresariales de nuestro tiempo, en el que aparecen firmas tan relevantes como: El Santander, el Grupo Volkswagen o el propio Corte Inglés.