Cuenta la tradición que tres reyes de Oriente siguieron una estrella para encontrar a Jesús en Belén. Se les conoce como Melchor, Gaspar y Baltasar, y se les celebra el 6 de enero, que se conoce como el Día de los Reyes Magos. Desde aquel lejano momento, fieles a su cita, regalan juguetes a los niños como en su día hicieron con Jesús, claro que en aquel momento no se trató de juguetes, sino de oro, incienso y mirra.
Hay otra interesante tradición y es la de Santa Claus, ese anciano jovial y barbudo vestido de rojo Coca-Cola, que vive en el Polo Norte y trae regalos a los niños en la noche del 24 de diciembre. Esta figura es conocida en diferentes países con distintos nombres, como Papá Noel en España y América Latina, San Nicolás en algunos países de Europa y Kris Kringle en Estados Unidos.
El ingente trabajo que han de desplegar los Reyes Magos -al igual que Santa Claus- en una sola noche hace preciso la ayuda de los pajes reales (o elfos, duendes y hadas). Gente de bien que colabora desinteresadamente y hacen que la celebración del Día de los Reyes Magos (o Nochebuena) sea más divertida y especial para los niños. Trabajan con ahínco en las fechas previas instalando los buzones para que los pequeños hagan llegar sus cartas a los Reyes Magos o Santa Claus, misivas con sus deseos, esperanzas y un breve repaso a lo bien que se han comportado durante todo el año por lo que, claro, son merecedores de que sus deseos (en forma de juguetes) sean atendidos.
En la pequeña localidad de Meco desde hace unos años los niños pueden hacer llegar sus cartas a los pajes de la calle Eslovenia
En la pequeña localidad de Meco desde hace unos años los niños pueden hacer llegar sus cartas a los pajes de la calle Eslovenia. Grandes estos vecinos que además de gestionar las misivas y hacerlas llegar a sus destinatarios (Reyes o Santa) obsequian a los pequeños en el momento de acercarse al buzón con libros o dulces, anticipo de lo que llegará.
Hoy los pajes de la calle Eslovenia se despedían de todos hasta el próximo año con sus mejores deseos:
«Esperamos que el 2023 nos traiga a todos fuerza, coraje y esperanza para afrontarlo. La próxima Navidad confiemos en que los duendes, elfos y hadas nos adjudiquen una franquicia de los buzones mágicos que se instalan en Meco y podamos seguir compartiendo con todos vosotros estos momentos.»
Sirva este breve post para felicitar a mis vecinos por su labor y les deseo de corazón que en este 2023 les adjudiquen la franquicia de buzones mágicos mequeros
No perdamos las tradiciones. Abrazo grande a los eslovenomequeros.
[…] los vecinos de la calle Eslovenia, quienes fueron el corazón de este proyecto desde el principio. Su entusiasmo y participación […]