Hace no tanto, los asistentes virtuales eran poco más que juguetes caros que entendían menos que un político en campaña. Pero ahora, OpenAI ha decidido darle un giro de tuerca a la situación con su flamante función de Tareas Programadas en ChatGPT. Disponible en fase beta para los usuarios de pago —porque, claro, nada bueno es gratis—, esta característica permite programar recordatorios y acciones futuras, como si de un mayordomo digital se tratase.
La idea es sencilla: le dices a ChatGPT qué necesitas y cuándo, y él se encarga del resto. Por ejemplo, puedes pedirle que te recuerde cada tarde las noticias económicas más relevantes, que practique contigo tagalo diariamente o que te avise del cumpleaños de tu exmujer, para así poder mandarle una nota que mezcle algo de ácido y mucha guasa, el tipo de barbaridad que hace que se acuerde de ti, de tu familia y de por qué sigue refunfuñando en el desayuno. Todo muy útil, siempre y cuando no olvides activar las notificaciones, no vaya a ser que el asistente trabaje más que tú.
Para los interesados en probar esta maravilla tecnológica, el proceso es relativamente sencillo. Primero, selecciona «GPT-4 con tareas programadas» en el selector de modelos de ChatGPT. Luego, indícale tus necesidades, como «Recuérdame cuando mi pasaporte caduque» o «Todos los viernes, dame un plan de fin de semana en función de mi ubicación y el pronóstico del tiempo». Eso sí, no te emociones demasiado: por ahora, solo puedes tener hasta diez tareas activas simultáneamente.
Al final, la responsabilidad de cumplir con tus compromisos sigue siendo tuya. Pero, al menos, ahora tendrás a quién echarle la culpa cuando algo salga mal.
La gestión de estas tareas se realiza a través de la sección «Tareas» en la versión web de ChatGPT, accesible desde el menú de perfil. Allí puedes revisar, editar o eliminar las tareas y recordatorios programados. Una vez completadas, recibirás notificaciones en las plataformas web, de escritorio y móvil. Todo muy moderno y eficiente, siempre y cuando no olvides que, al final del día, el que tiene que hacer las cosas eres tú.
Esta función sitúa a ChatGPT en competencia directa con asistentes virtuales como Siri o Alexa, aunque con la ventaja de su capacidad lingüística y contextual superior. Sin embargo, no todo es color de rosa. La tecnología aún tiene limitaciones, y es probable que te encuentres con algún que otro fallo en el camino. Pero, ¿qué sería de la vida sin un poco de incertidumbre?
En resumen, las Tareas Programadas de ChatGPT prometen facilitar la organización de tus actividades diarias y mejorar tu productividad. Eso sí, no esperes milagros. Al final, la responsabilidad de cumplir con tus compromisos sigue siendo tuya. Pero, al menos, ahora tendrás a quién echarle la culpa cuando algo salga mal. Mientras cierro este post, se me está haciendo bola el tagalo.